miércoles, 1 de septiembre de 2010

HIMNO DEL PERU ¿QUIEN FUE JACOB?



He indagado en la INTERNET quien, como y porque se decidió cambiar el Himno Nacional del Perú, lo hice intrigado pues no me había percatado de ello hasta hoy cuando, en puerta del palacio de gobierno, entonaron los himnos de Perú y Paraguay en un acto protocolar por la visita del presidente de ese país hermano, Fernando Lugo Méndez, grande fue mi sorpresa al escuchar que cantaban la sexta estrofa de nuestro himno en lugar de la primera como siempre hacíamos, ante ello hice la indagación que mencione al comienzo, sin resultados satisfactorios.

Ello me ha llevado también a examinar el contenido de la sexta estrofa, pues tratandose del himno de un país, compuesto por varias naciones como el Perú, es necesario que en cada palabra que entonamos estén representadas la historia, los derechos, obligaciones, intereses y las ilusiones de cada uno y de todos los peruanos.


Para contextualizar este comentario debemos recordar que en 1923, el ilustre joven Victor Raul Haya de la Torre se opuso radicalmente a la manipulacion politica mediante el uso de emblemas religiosos, que solo traen consigo mas obscurantismo, Jorge Basadre comenta estos hechos:

"En mayo de 1923, el Arzobispo Emilio Lisson publicó una instrucción pastoral para consagrar el Perú al Sagrado Corazón de Jesús, que señalaba: "...La República peruana, católica por convicción, por tradición y por la Constitución, será consagrada oficialmente al Sacratísimo Corazón de Jesús en el próximo mes y la imagen de este Sacratísimo Corazón de Jesús será entronizada en la plaza principal de esta capital. 


Tomada esta determinación por el Episcopado nacional, interpretando la voluntad de sus feligreses, ha sido comunicada al señor D. Augusto B. Leguía, presidente Constitucional de la República, quien, en su calidad de Patrono de la Iglesia en el Perú, se ha dignado tomar el acto bajo su oficial y alta protección y señalará el día y dictará las medidas que estime convenientes." 

Sin embargo llegado el día de la consagración, Haya de la Torre encabezando una manifestación pública evito que ésta se lleve a cabo, con el nada cristiano saldo de cinco muertos: el estudiante Manuel Alarcón Vidalón, el obrero Salomón Ponce y tres hombres de la fuerza pública: el gendarme Ruperto Goitia y los inspectores Jesús Vázquez y José E. Torres.
Tenemos a la vista la letra de la sexta estrofa del nuestro himno nacional, que empieza así:


"En su cima los Andes sostengan"
En esta primera oración se menciona a los Andes como parte del grandioso y singular paisaje del Perú, pero la acción viene determinada por la palabra "sostengan", esta palabrita aparentemente inocua es un tiempo verbal en presente, pero del modo subjuntivo que expresa un hecho hipotético, hecho deseado o hecho esperado; no un hecho real, la frase debería decir:
"En su cima los Andes SOSTIENEN"
la bandera o pendón bicolor,


Así en Presente INDICATIVO como un grito de orgullo y afirmacion nacional, pues ya no debemos vivir en subjuntivo, debemos desterrar el estilo ecléctico ambivalente, obscurantista, que algunos denominan "escopeta de dos cañones".


Mas abajo otra frase inquietante, propia de la época que se escribió el himno
"A su sombra vivamos tranquilos,"
Denota una actitud de pasividad tanto de las montañas andinas como del poblador, pues se les esta comparando de manera subliminal con un tejado o un sombrero que debe dar sombra al poblador de las planicies de la costa o de la selva; ahora sabemos que los andes están sujetos a un intenso geodinamismo y también a un intenso dinamismo económico y social, tanto, que de los productos de la sierra vivimos hoy en día en el Perú (minería).
Y como para terminar de indignar, se remata la estrofa con el siguiente bodrio:


"renovemos el gran juramento
que rendimos al Dios de Jacob."
¿Que juramento hemos rendido al dios de Jacob?,

Para la fecha en que fue escrita esta letra es admisible esta expresión, pero en la actualidad indigna tanto como le indigno al ilustre Haya de la torre la consagración de todo un país al corazón de Jesús, sin respetarse la religión de los Incas, ni la religión de las más de setenta etnias que existen en nuestro país, además quien fue Jacob?


La Biblia dice que cuando los muchachos estaban creciendo, Esaú, el cazador, un día vino hambriento, y le pidió a su hermano Jacob el plato de lentejas que estaba comiendo. Jacob, por consejo de su madre, le pidió que le vendiera la primogenitura como hijo mayor, a cambio del alimento. Esaú, viendo que este derecho era inservible para él si llegaba a morir, accedió, y así, en palabras bíblicas "despreció su primogenitura".


Y cuando Isaac envejeció, y había perdido bastante su vista al punto de quedar casi ciego, envió a Esaú a los campos, diciéndole que cazara algo para una última comida antes de recibir su bendición. Rebeca escuchó, y le dijo a Jacob que degollara dos cabritos, y se los trajera a su padre, para que recibiera de él la bendición de su hermano.


 Jacob objetó que su padre, aunque estaba casi ciego, podría notar la sustitución sólo con tocarlo, ya que Esaú era bastante velludo, y él era lampiño. Rebeca le dijo que no se preocupara, y le colocó a modo de fundas las pieles de los cabritos sobre cuello y manos y ese modo lograron engañar a Isaac ( a su padre), dejandonos una lección donde se percibe con fuerza la ausencia de ética y moralidad y ademas la ya famosa frase muy de moda en nuestros dias "se vende por un plato de lentejas".