Hugo Chávez responde a la guerra de Año Nuevo iniciada por EE.UU.
Hugo Chávez ha puesto en marcha "La guerra de Año Nuevo" negandose a permitir que un nuevo embajador de EE.UU. Larry Palmer se inatale en su país, incluso a costa de un posible incumplimiento de las relaciones diplomáticas.
El conflicto por aceptacion a Palmer surgió el verano pasado. Luego, que el ex embajador de EE.UU. Patrick Duddy había salido de Caracas debido a la expiración de su estancia en Venezuela. Sin embargo, el nuevo nombramiento no ha tenido lugar.
A Chávez no le gustó la declaración de Larry Palmer, que la moral del ejército de Venezuela es bajo, y que la ideología del país es cada vez más influenciado por la Cuba socialista. Por último, Palmer dijo que Venezuela acogió "bases terroristas" de las "Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), lo que Caracas siempre ha negado.
Chávez llamó a su lugar a otro diplomático. Sin embargo el Departamento de Estado se negó. Además, los EE.UU. amenazó a Venezuela, que la negativa a aceptar el embajador puede causar un mayor deterioro de las relaciones bilaterales ya complicada.
"Nos hemos negado a reconocer a este señor (Palmer), y ahora el gobierno de EE.UU. ha amenazado con medidas de represalia. Si quieren expulsar a nuestro embajador, que lo hagan! Si quieren romper las relaciones diplomáticas, que lo hagan. Para llegar aquí, el embajador tiene que respetar el país. Ellos no estaban contentos con el hecho de que el 17 de diciembre el Parlamento venezolano otorgó poderes adicionales Chávez para promulgar leyes sin pasar por el propio Parlamento. Chávez aprovechó lo suficiente para la ira de Washington.
En particular, creó 10 distritos militares especiales, muchos de los cuales se encuentran en la frontera con Colombia, el principal aliado de EE.UU. en la región. Otros se encuentran en el territorio de Venezuela, en las provincias encabezadas por la oposición. En esta decisión de Chávez, Washington vio la presión sobre sus oponentes.
A los EE.UU. no le gusta sus leyes que tengan por finalidad el fortalecimiento de la supervisión de las universidades y cortar los canales de financiación de las organizaciones no gubernamentales del extranjero. Como sabemos gracias a las subvenciones como los estadounidenses han alimentado "revoluciones de color" en todo el mundo.
La relación entre los EE.UU. y Venezuela ha cambiado drásticamente con la llegada de Hugo Chávez al poder en Caracas. Pero ahora estamos hablando de la amenaza de la ruptura de las relaciones diplomáticas, lo que equivale a un estado de guerra.
Boris Martínov, Director Adjunto del Instituto de países de América Latina, comentó sobre la situación de Pravda.
- ¿Esta Chávez en realidad, no sólo de palabra, listo para desafiar a los EE.UU.?
"Esto no significa que él tiene la intención de romper las relaciones con los Estados Unidos, a sabiendas de la dependencia de Venezuela en las exportaciones de petróleo. Palabras de Chávez sobre una posible ruptura es un teatro de marionetas, un espectáculo de un solo hombre.
- ¿Por qué los EE.UU. toman una posición tan intransigente?
"Los estadounidenses no van a ceder; De lo contrario, significaría perder la cara. Esto es importante sobre todo ahora, cuando los EE.UU. ha cometido tantos errores en términos de América Latina Si tenemos en cuenta las declaraciones duras de Palmer, no es sorprendente. EE.UU. es ahora va a recuperar su posición perdida en América Latina que considera su patio trasero, si no totalmente, al menos parcialmente.
Incluso el "pacificador" de Obama, que también cometió algunos errores en cuanto a la política hacia la dirección estratégica al parecer al sur del Río Grande hace declaraciones de este tipo.
Sin embargo, mayoría de los latinoamericanos no están de acuerdo. Ellos creen que no necesita instrucciones sobre cómo vivir sus vidas, ya que son capaces de elegir la forma más adecuada. Usted no enseña a los tigres asiáticos cómo deben vivir, ¿verdad?
Fuente: Pravda
