martes, 8 de junio de 2010

José María Arguedas: Centenario de su Nacimiento







Como homenaje por el centenario del nacimiento del autor de Los ríos profundos. Desde esta página (diario La República) iniciamos una campaña para honrar a uno de nuestros más altos escritores cuya obra es una prueba de amor y de identidad con el Perú.

El Perú de hoy, y seguro el Perú del futuro, siempre le deberá a José María Arguedas el que haya nacido en nuestra tierra y sobre todo que haya legado una obra inmensa, intensa, que convoca a todos los peruanos.

Una obra literaria y antropológica que, por todos sus ángulos, es una confesión de amor al Perú, pero también una invitación a reflexionar sobre nuestro país para ser nosotros mismos.

El próximo año, el 18 de enero exactamente, se cumple el centenario del nacimiento de este escritor que nació en Andahuaylas. Y por ello hacemos el llamado a las más altas autoridades de nuestros país para que, como un acto de justicia, nominen el 2011 “Centenario del nacimiento de José María Arguedas”.

Creemos que esta sería una manera de honrarlo y tenerlo presente todos los días. Además ello haría que su nombre se escuche entre nuestros escolares y universitarios y que esto los induzca a buscar sus obras para leerlas. Entre los políticos, para que muchos de ellos sepan qué es ser un hombre público y limpio.

Hemos dicho que su obra convoca a todos los peruanos. Todos tenemos el deber de conocerla (como señaló Abelardo Oquendo días atrás en esta página, también su obra antropológica), ya que quizás así aprendamos a mirarnos de una vez por todas sin menosprecio y racismo.

Arguedas tenía tan claro eso que lo dejó escrito en las páginas de esa formidable novela testamentaria que es El zorro de arriba y el zorro de abajo. Allí anotó: “Cualquier hombre no engrilletado y embrutecido por el egoísmo puede vivir, feliz, todas las patrias”.
Eso es Arguedas, una invitación a reconciliarnos entre nosotros, como ciudadanos y como país, lo mismo que quería Mariátegui con “Peruanicemos el Perú”.

Su obra antropológica, subrayaba Oquendo, todavía es una deuda editorial para ser conocida y difundida, por eso muy bien haría el Fondo Editorial del Congreso del Perú en asumir esa tarea.

Para terminar, queremos invitar a las personalidades e instituciones de la cultura peruana a adherirse a este llamado enviando un comentario de 1200 caracteres como parte de esta campaña para que el 2011 sea del “Centenario del nacimiento de José María Arguedas”.

El dato

El escritor. José María Arguedas nació el 18 de enero de 1911. Murió en Lima el 2 de diciembre de 1969, cinco días después de haberse disparado en la sien.


Fuente: La república (08/06/2010)

AMÉRICA: FARISEOS DE LA PAZ


La paz armada en América:



En la reunión de la Organización de Estados Americanos (OEA) han sonado conmovedoras palabras de paz. El más sentimental pacifista ha sido Jaime Bermúdez, canciller de Colombia.

Lástima no más que Colombia sea el país latinoamericano que más gasta en armas: 5.5 mil millones de dólares al año.

Chile le pisa el talón (de hierro), con casi cinco mil millones. Eso aparece en un estudio del Instituto Internacional para la Paz (SIPRI) de Suecia y la Facultad latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), con sede en Chile.


Chile, con apenas 17 millones de habitantes, gasta en armas casi tanto como Colombia, que tiene 41 millones de pobladores.

Chile encabeza en nuestra América el gasto militar por habitante (290 dólares), superando a Colombia (115 dólares).

Chile gasta en armas más que México, que en ese rubro emplea 4,762 millones de dólares. México tiene 108 millones de habitantes, seis veces y pico más que Chile.

Los países de América del Sur (el Consejo Sudamericano de Defensa de la Unasur) pidieron a Bogotá que proporcione detalles sobre el incremento de sus gastos militares.

El gobierno
Colombiano se ha negado a cumplir esa obligación y le echa la culpa al “secretismo” de Washington.


Sin duda que el presupuesto militar Colombiano omite la ayuda –el intervencionismo– de Estados Unidos, que tiene a su disposición siete bases aéreas en Colombia, y que sin duda paga por eso.

No hay que omitir que Bogotá recibe 500 millones de
dólares al año para el Plan Colombia, que incluye presencia de militares estadounidenses so pretexto de combatir el narcotráfico.


Hay que destacar, por otra parte, que el gasto militar de Venezuela fue de 4,186 millones de dólares en 2009, lo cual significa una disminución de 25% respecto del año anterior.

El continente sabe que Washington no pierde ocasión para denunciar el “armamentismo” de Venezuela, al mismo tiempo que calla sobre el Arsenal creciente de Colombia y Chile. No es sorprendente, puesto que Washington es el gran abastecedor de armas para esos países.

Hablar de paz delante de la señora Clinton resulta, por otra parte, irónico. Estados Unidos es el país del planeta que más gasta en armas y soldados.

En octubre de 2009, el Senado estadounidense aprobó un presupuesto militar de 626 mil millones de
dólares (casi la mitad de su presupuesto total).

Eso no incluye los 400 mil millones de
dólares que Washington emplea en muertos y en directo en Irak y Afganistán.


El investigador panameño Marco Gandásegui precisa que el gasto de guerra es para Estados Unidos un imperativo. “Sin guerra no hay recuperación económica”, subraya.

Para los ideólogos de Washington las guerras, el armamentismo y la destrucción masiva son muy saludables para un “paciente enfermo como el capitalismo norteamericano”. El mal es contagioso.


Fuente: La Primera (08/06/2010)